El comportamiento de casi toda la materia en nuestro entorno cotidiano puede ser descrito en términos de dos tipos de fuerzas: la fuerza gravitacional y la fuerza electromagnética. Fuerzas adicionales resultan involucradas solo cuando se considera la acción de partículas en un rango muy cercano, tales como las partículas elementales dentro del núcleo atómico. El papel de las fuerzas gravitacionales nos es familiar. Todo el restante comportamiento de la materia ordinaria, desde el movimiento de cuerpos al colisionar hasta los motores eléctricos y las reacciones químicas, puede ser atribuido a fuerzas electromagnéticas. Cuando las fuerzas electromagnéticas ocurren a distancias atómicas, como en las reacciones químicas, los efectos son complicados y pueden ser calculados solo a lo sumo aproximadamente usando leyes de la mecánica cuántica o leyes empíricas. Sin embargo, para el movimiento de objetos que consisten de muchos átomos o para el movimiento de una simple partícula atómica interactuante a larga distancia con muchas partículas, los cálculos de los efectos de las fuerzas electromagnéticas resultan directos. El movimiento de partículas cargadas en un acelerador o en un magnetrón, el comportamiento de todos los tipos de máquinas eléctricas, la acción de un transmisor de radio sobre un receptor distante, todos siguen las leyes de la teoría que se estudiará en esta asignatura, una teoría llamada electromagnetismo clásico.

La teoría de los fenómenos electromagnéticos tiene una importancia extremadamente grande. Es la primera teoría  invariante desde el punto de vista relativista. Desempeñó un papel decisivo en la aparición y argumentación de la teoría de la relatividad y fue aquel polígono en el que se sometieron a prueba muchas de las nuevas ideas. La electrodinámica cuántica es la teoría cuántica mejor elaborada, cuyas predicciones concuerdan muy bien con el experimento, pese a que todavía tiene contradicciones internas y se considera aún no acabada.

Es esencial la importancia del electromagnetismo desde el punto de vista de la filosofía general y de la concepción del mundo. Por ejemplo, en los márgenes de los fenómenos electromagnéticos se manifiestan de manera precisa las peculiaridades de la forma de campo de existencia de la materia, observándose bien las transformaciones mutuas de sus diversas formas y las modificaciones mutuas de las distintas formas de energía.